Buenos Aires prepara el 21º encuentro de los jóvenes con la literatura entre el 11 y el 30 de julio de 2011.
La Fundación El Libro anuncia la realización de la 21ª Feria del Libro Infantil y Juvenil
Con el lema "Aires de Buenos Libros", la Feria del Libro Infantil y Juvenil se desarrollará desde el 11 hasta el 30 de julio de 2011 en el Centro de Exposiciones de la Ciudad de Buenos Aires, Avdas. Figueroa Alcorta y Pueyrredón.
Las palabras vuelan y construyen en el aire ciudades pobladas de encendidos lectores: cazadores de historias, risas, conocimientos, experiencias y tradiciones.
Aires de buenos libros soplarán en la 21º Feria del Libro Infantil y Juvenil para celebrar que la UNESCO ha designado a Buenos Aires como Capital Mundial del Libro 2011.
Además de narraciones, juegos, internet, concursos, talleres, espectáculos y miles de libros que la convierten en una de las propuestas más atractivas para los padres durante el receso invernal, en esta edición se realizarán:
Visitas de escolares y delegacionesLos contingentes educativos formales y no formales podrán ingresar sin cargo durante toda la Feria. La visita se deberá solicitar previamente completando el formulario disponible en:
http://www.el-libro.org.ar/infantil
Para mayor información llamar a (11) 4370-0600, de lunes a viernes de 09:30 a 17:00 o contactarse por e-mail:
escuelas@el-libro.org.ar
Concursos para alumnos y docentes- Para lo chicos las temáticas son ilustración, escritura y cómics. Hay diversas categorías para alumnos organizadas por edades.
- Para los docentes se realizará un concurso de microrelatos: "Diminutextos".
Para más información:
concursos@el-libro.org.ar
Del 20 al 22 de julio
21ª Jornadas para Docentes y Mediadores de lectura "Nuevos aires de lectura"Destinadas a docentes de todos los niveles, bibliotecarios, estudiantes, profesionales de la salud, educación especial y espacios comunitarios.
Conferencia de apertura a cargo de Gonzalo Oyarzún (Subdirector de Bibliotecas Públicas de Chile) y cierre a cargo de de Daniel Cassany (Universidad de Barcelona, España)
Para mayor información:
hernanledesma@el-libro.org.ar
18 y 19 de julio
5º Encuentro de Profesionales del Libro Infantil y Juvenil "Aires de buenos negocios"Destinado a libreros, personal de librerías, editores y estudiantes de materias afines al sector editorial
Más información:
profesionales@el-libro.org.ar
23 de julio
5º Foro de Promoción de la Lectura y el Libro "Aires de Buenos libros en la biblioteca"Organizado por ABGRA Destinado a bibliotecarios, docentes y padres. Busca ampliar la formación necesaria para seleccionar libros para niños y jóvenes.
Informes e inscripción:
secretaria@abgra.org.ar
23 de julio
2º CosplayChicos y adolescentes recorrerán la Feria vestidos con la indumentaria de sus personajes favoritos de manga, animé, comics y videojuegos.
29 y 30 de julio
2ºFestival de la Historieta "Superheroico"Talleres de guión, dibujo y humor gráfico. Charlas con historietistas argentinos y con el destacado historietista estadounidense Marv Wolfman.
28 de julio
Entrega de los Premios Pregonero 201121ª Edición de los premios destinados a los difusores de la literatura infantil y juvenil en diferentes ámbitos de trabajo.
Recepción de propuestas:
fernandavela@el-libro.org.ar
21 de julio
Espacio Joven para Todos. Actividades destinadas a los jóvenes. Homenaje a María Elena Walsh, diferentes actividades para evocar a esta autora fundamental de la literatura infantil de la Argentina.
La Feria del Libro Infantil y Juvenil continúa y va por más.
Más lectores, más librerías, más bibliotecas, más lectura en las aulas. En definitiva: más libros para seguir creciendo.
07-06-2011
Según Jorge Luis Borges "de casi infinitos instrumentos que son obras del hombre, el más singular es el libro"...¿Cómo el creador de estos instrumentos no iba a clasificarlos y almacenarlos al amparo de bibliotecas modestas o suntuosas y protegidas de la codicia de sus semejantes? También necesitó identificarlos, recordando su pertenencia a través de marcas, más aún, luego de la aparición de la imprenta donde los ejemplares que se editaban eran idénticos unos de otros.
De estos signos de propiedad, el más antiguo es el que se guarda en el Museo Británico, una tablilla de loza azulada que se insertaba en las caras de los tomos y papiros, pertenecientes al monarca egipcio Amenofis y a la reina Tiy, que gobernaron hacia el año 1.400 antes de nuestra era, sentando las bases del ex libris que se convertiría con el paso del tiempo, además, en un símbolo de la belleza y talento de distintas culturas que volcaron en estas pequeñas viñetas grandes esfuerzos artesanales y creativos.
La cuna del ex libris es sin lugar a dudas Alemania. Coincidiendo con la aparición de grandes impresores, artistas como Durero, Cranach y Holbein, se ocuparían de realizar pequeñas obras de arte para aristócratas y bibliófilos de la época, como lo hará también Goya en España.
Las primeras marcas eran emblemas y blasones heráldicos con ornamentaciones (que podían entender incluso las personas analfabetas) y en algunos casos se las hacía portadoras de divisas y sentencias (7) en latín o en lenguas vernáculas.
Evolucionando más tarde en una manera más artística y representando la condición social o profesional, aspiraciones, gustos, o el pensamiento filosófico del poseedor de la biblioteca, también se podía poner como distintivo el contenido temático de la misma.
En otros ex libris, aparece un simple monograma o directamente el nombre del propietario adornado con guardas, cintas, arreglos florales, etc., que son a la vez testimonio de la época en la que fueron realizados.
Los estilos a los que los artistas recurrieron son paralelos a la historia del libro. La imaginación de los autores fue tan fecunda que hoy los coleccionistas de ex libris los clasifican por su calidad artística, por época, por lugares o zonas determinadas, por escuela, por autor, o por métodos de impresión; sin dejar de tener en cuenta la figuración o la temática, lo que hace que la producción sea tan basta que resulte imposible agrupar o enumerar la totalidad de estas marcas.
Casi todas las tendencias y escuelas del Arte han dejado sus huellas a través de los ex libris, y a medida que se popularizaron las bibliotecas, entra en juego la elección de los motivos más variados, lo que permite la introducción de estilos, desde los religiosos del Gótico y Renacentista, hasta los impuestos por Reyes y Nobles de Francia, Inglaterra y otros países europeos, para llegar a fines del siglo XIX, donde, además, se empieza a coleccionarlos.
El momento más importante en cuanto a encargos y producción de ex libris se ubica a principios del siglo XX, donde se suma a los estilos vigentes un sin número de neos (a, b) y motivos eclécticos que encontraron siempre bibliófilos dispuestos a mezclar en sus marcas de biblioteca, dioses griegos con guardas egipcias y caracteres góticos, vinculados más al capricho que al buen gusto.
La forma exterior (a, b, c) de los ex libris varía desde los polígonos regulares, hasta los perímetros más caprichosos, sin embargo lo más usual es que se hallen grabados en pequeños pliegos rectangulares o cuadrados.
Con respecto al tamaño, es otro factor interesante ya que por alcanzar originalidad algunos recurren a un tamaño poco legible, o por el contrario, a la exageración del formato, tornando imposible su adhesión a un libro pequeño.
La psicología del propietario de una biblioteca podría ser estudiada a partir de su ex libris, que como señaláramos al principio, nos habla de sus gustos, aspiraciones, pensamientos, etc.; pero es bueno tener en cuenta que, en ocasiones, sería oportuno recordar aquello de: "dime de qué presumes y te diré de qué careces".